jueves, 30 de octubre de 2008

Hoy recién he tenido un poco de tiempo para el blog, ya casi no puedo entrar
y mas aun .. con suerte puedo respirar...He tenido día de lokos, mi nuevo depto, la uni ya casi cerrando el primer año. elección de mi hermano... etc k cosas no..
Como sigo acá de pie, ni idea
y más aun, como he pasado todos mis ramos sin echarme uno .. jajaja ni yo lo creo
pero lo hice, siento que nuevamente he logrado las cosas que me he propuesto...admiro yo misma lo luchadora que soy, admiro mi capacidad de seguir lo que anhelo..Y bueno ...
Todo esto sola no lo puedo hacer… Si no es por ti... Tú que me ayudas en todo momento
que me entregas lo mejor de ti, me das ánimo para superar cada prueba...Y que me haces feliz
si feliz, con tan poco... gracias por existir y por estar aquí... siempre...!

gracias Talk.-





EL SUICIDIO DE LA PRINCESA



Ella era buena, politicamente correcta (como no), ni la mas guapa, ni la mas fea, lista como el hambre, y a veces, ingenua como un bebe
Reía y lloraba a partes iguales
Gritaba y callaba y su alma anhelante se consumia
...Pero nadie miraba.
¿Por qué habría de estar triste la princesa, si lo tiene todo?

¿Cómo se puede llorar entre sabanas de algodón egipcio?
¿Quién piensa en la muerte, pudiendo comprarlo todo?
¿TODO?
La princesa no compraba a su príncipe, no podía, ansiaba que ese príncipe gentil´justo y que la comprendía como nadie, volviera a mirarla, con aquellos ojos de pasado, lagos en los que veía reflejada su alma y el futuro, empapado en un rosa brillante. Sin embargo la princesa dormia a la espera de un sueño, hace mucho ya desvanecido. La metamorfosis del principe era inversamente proporcional a los cuentos de hadas... y ahora el príncipe se convertía día a día, en un sapo de proporciones descomunales.

Cada mañana desayunaba manzanas envenenadas, repletas de desilusiones y sin sabores.
Su madre, la reina, siempre miraba a otro lado, envuelta en su infinito mundo personal, su gran corazón no detectaba, que su princesa, estaba herida de muerte.

Cada día era mas triste que el anterior, una cadena constante de lágrimas con sabor a muerte.
La princesa tenía sueños, aves plateadas que volaban con las alas rotas, en medio de un cielo turbulento y tormentoso. La princesa tenía ilusiones y la soledad, las hundía en el fango.
Ella siempre estaba rodeada de gente, conversaciones triviales, conversaciones profundas (pero que no la tocaban), nadie le pregunto nunca:

"¿Va todo bien?"
"¿Necesitas un amigo?"
" ¿Tienes algún problema?"

Claro, todo el mundo suponia que era muy feliz.

Pero estaba infinitamente sola, aunque tenía a sus doncellas, bellas como un monet a distancia, egoistas como un niño de guardería. Las doncellas siempre empezaban las conversaciones, con su palabra favorita "yo", por eso nunca advirtieron el agujero que se transparentaba en el pecho de la princesa.

Oh las doncellas, las extrañaría, el "yo" tiende a ser sinónimo de niñez y las doncellas no querían dejar de ser niñas.

La peor soledad es la que te arropa, cuando estas sumergida en un mar de gente. Se puede estar físicamente solo y sentirse pleno, pero la princesa tenía el espiritu solo, vacio, triste... y por eso lo hizo.

Una mañana, al igual que todas las idénticas y soporíferas mañanas, de su ya caduca vida, se levanto y dejo sus sueños y sus ilusiones al pie de la cama.

Se sento con parsimonia a la mesa y se sirvió una triple ración de manzanas envenenadas.
La princesa no volvió a mirar al mundo con sus hermosos ojos tristes.

Por las calles y en las grandes esferas, incluso dentro de su palacio, la gente hablaba del suicidio de la princesa. Va contra todas las leyes del mundo, cuando se ha visto que las princesas se suicidan, pero... si lo tienen todo... ¿o no?
Escrito por la mitad perdida